Al principio, antes de la creación de sus himnos se cantaban las canciones que conocían los legionarios, el himno de Infantería, La Madelon y otras, se incorporaron canciones que aportaban los extranjeros como era el Deutschland über alles alemán y el Tipperary ingles
La canción, “Tercios Heroicos” fue creada por el músico militar Francisco Cales y el poeta Antonio Soler, y se convirtió en el primer Himno Oficial del Cuerpo
Letra de Tercios Heróicos:
Tercios heroicos, Legión valiente,
Que en la vanguardia sabéis morir,
Sois el orgullo de nuestra España,
Vuestras hazañas al combatir.
Los que en España no habéis nacido,
Y sangre y vida dais en su honor,
Hijos de España sois predilectos,
Habéis ganado su excelso amor.
ESTRIBILLO
Legionarios a luchar, Legionarios a morir,
Legionarios a luchar, Legionarios a morir.
¡Viva España! Valientes hermanos,
¡Viva España! Legión inmortal,
Que es gran gloria morir por España,
Abrazado a un sublime ideal.
Con la sangre que vierten sus hijos,
Más frondoso el laurel brotará,
Del que haremos coronas que España,
Que en sus sienes augustas pondrá.
¡Viva España! ¡Viva La Legión!
Ya surja ruda y feroz pelea,
O de la lucha cese el afán,
Notad que os cercan siempre amorosas,
Sutiles sombras que un beso os dan.
El pensamiento de España entera,
Vedlo en el tenue, fugaz rumor,
Que nunca cesa de acariciaros,
De vuestros pasos alrededor.
ESTRIBILLO
Tercios invictos, Legión de bravos,
El mundo entero con altivez,
Podéis mirarlo porque vosotros
Donde el caído lloró angustiado,
Donde el hermano la vida dio,
Donde traiciones piden venganza,
Vuestra bravura siempre acudió.
ESTRIBILLO
A finales de 1920, con música del maestro Modesto Romero y letra del Comandante Emilio Guillém Pedemonti, aparece “La Canción del Legionario”, que años más tarde y hasta nuestros días es el Himno Oficial de La Legión.
Letra de La canción del Legionario:
Soy valiente y leal Legionario,
Soy soldado de brava Legión,
Pesa en mi alma doliente calvario,
Que en el fuego busca redención.
Mi divisa no conoce el miedo,
Mi destino tan solo es sufrir,
Mi bandera luchar con denuedo,
Hasta conseguir vencer o morir.
Legionario, Legionario,
Que te entregas a luchar,
Y al azar dejas tu suerte,
Pues tu vida es un azar.
Legionario, Legionario,
De bravura sin igual,
Sin en la guerra hallas la muerte,
Tendrás siempre por sudario,
Legionario, La Bandera Nacional.
¡Legionarios a luchar! ¡Legionarios a morir!
Somos héroes incógnitos todos,
Nadie aspire a saber quien soy yo,
Mil tragdias, de diversos modos,
El correr de la vida forjó.
Cada uno será lo que quiera,
Nada importa su vida anterior,
Pero juntos formamos Bandera,
Que da a La Legión
El más alto honor.
Legionario, Legionario,
Que te entregas a luchar,
Y al azar dejas tu suerte,
Pues tu vida es un azar.
Legionario, Legionario,
De bravura sin igual,
Si en la guerra hallas la muerte,
Tendrás siempre por sudario,
Legionario, La Bandera Nacional.
¡Legionarios a luchar! ¡Legionarios a morir!
El origen de “El Novio de la Muerte” es un cuplé compuesto por Juan Costa y letra de Fidel Prado, siendo su primera interprete Mercedes Fernández González, cuyo nombre artístico era Lola Montes. La cancion se estrenó en el teatro malagueño “Vital Aza” en julio de 1921. Desde que Millán Astray la escuchó, quedó incorporada al repertorio legionario, cantándose en el acto de homenaje a los que dieron su vida por España.
La letra se basa en un suceso real que tuvo lugar el 7 de enero de 1921 en Beni Hassán. En el transcurso de una acción militar durante la Guerra del Rif, falleció como consecuencia de heridas de guerra el cabo de la primera bandera de la legión Baltasar Queija de la Vega. En su bolsillo se encontraron al parecer unos versos que acababa de escribir, emocionado por la reciente muerte de su novia. Poco antes había expresado a sus compañeros el deseo de reunirse prontamente con ella en la otra vida. Esta historia fue recogida por el fundador de la legión española, Millan Astray, en su libro La Legión... Al Tercio. Sin embargo, dado lo novelesco del suceso y la falta de datos sobre la actividad poética de Baltasar Queija de la Vega, algunos historiadores la han calificado como leyenda.
Letra del Novio de la Muerte:
Nadie en el Tercio sabía
quién era aquel legionario
tan audaz y temerario
que a la Legión se alistó.
Nadie sabía su historia,
mas la Legión suponía
que un gran dolor le mordía
como un lobo el corazón.
Mas si alguno quién era le preguntaba,
con dolor y rudeza le contestaba:
«Soy un hombre a quien la suerte
hirió con zarpa de fiera,
soy un novio de la muerte
que va a unirse en lazo fuerte
con tan leal compañera».
Cuando más rudo era el fuego
y la pelea más fiera,
defendiendo a su bandera,
el legionario avanzó.
Y sin temer al empuje
del enemigo exaltado,
supo morir como un bravo
y la enseña rescató.
Y al regar con su sangre la tierra ardiente,
murmuró el legionario con voz doliente:
«Soy un hombre a quien la suerte
hirió con zarpa de fiera,
soy un novio de la muerte
que va a unirse en lazo fuerte
con tal leal compañera».
Cuando al fin le recogieron,
entre su pecho encontraron
una carta y un retrato
de una divina mujer.
Aquella carta decía:
«...si algún día Dios te llama,
para mí un puesto reclama
que a buscarte pronto iré».
Y en el último beso que le enviaba,
su postrer despedida le consagraba.
«Por ir a tu lado a verte,
mi más leal compañera,
me hice novio de la muerte,
la estreché con lazo fuerte
y su amor fue mi bandera».